Por ex diputado provincial Nicolas E Mercado.
El nuevo desembarco del Kishnerismo en La Rioja, se da emulando a Cristóbal Colon, con sus tres carabelas.
Como una forma de legitimar el arreglo por una candidatura del Bederismo y el Quintelismo, llegó el Gobernador Bonaerense Daniel Scioli, y el discurso es la unidad partidaria, la necesidad de garantizar a La Rioja los recursos para mantener los magros sueldos de la Administración Pública y el ahora candidato a gobernador Ricardo Quintela, ya no exige la Coparticipación Municipal, por la que organizaba movilizaciones por las calles de la capital y tiraba la basura frente la Casa de Gobierno y Residencia del Gobernador.
El segundo desembarco es el de La Niña, con Sergio Massa, el día 24 de Mayo, de la mano también de Beder con su operador a nivel nacional, el Negro Yoma, y aquí se simula la fundación de un fuerte en Aimogasta, con el jefe comunal Minusi y el desaprensivo peronista, ya se ilusiona con tener una oposición a Beder y a Cristina, al no conocer los pormenores de la visita de Massa.
El tercer desembarco es el de Randazzo, me parece que vendrá por la Cámara de Diputados, y de esta forma el Kischnerismo, en retirada a nivel nacional, comienza a levantar las banderas de la reconstrucción de La Rioja y el Gobernador, con el presupuesto de la provincia en mano, asignando los recursos para la campaña que seguramente lo consagraran como Senador de La Rioja.
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