'En Famatina hay glaciares y cuerpos de hielo'

INFORME DE CEDHA





Lo dice el informe del Centro de Derechos Humanos y Ambiente (CEDHA), indicando además que “aportan al caudal de los ríos de la zona”, es decir que “nutren de agua potable a muchas localidades con importantes centros poblacionales y agricultura.
En la zona de Famatina y Chilecito de norte a sur, contribuyen a la cuenca, el Río Durazno, Río Achavíl, Río Marco, Río Amarillo, Río Oro, y Río Miranda.Todos tienen sus nacientes en los Nevados de Famatina y en sus glaciares”.

Desde el Centro de Derechos Humanos y Ambiente (CEDHA), a través de un informe aseguraron que “además de los glaciares de la zona Noroeste, en las sierras de Famatina también se encuentran cuerpos de hielo que aportan al caudal de los ríos de la zona. Se trata de glaciares y cuerpos de hielo ubicados en la falda occidental de las sierras. Estos ríos nutren de agua potable a muchas localidades con importantes centros poblacionales y agricultura”.

Asimismo, detallan que “estos incluyen Santo Domingo, Campanas, Angúlo, Chañamuyo, Pituil, Alto Carrizal, Carrizal, Famatina, Sañogasta, Nonogasta, Chilecito, Villa Unión, y Villa Castel. La cuenca de Antinaco-Los Colorados (también conocido como Valle de Chilecito o Bajos de Santa Elena) es nutrida por ríos que nacen en las sierras de Sañogasta y los nevados del Famatina. En la zona de Famatina y Chilecito de norte a sur, contribuyen a la cuenca, el Río Durazno, Río Achavíl, Río Marco, Río Amarillo, Río Oro, y Río Miranda. Todos estos ríos tienen sus nacientes en los Nevados de Famatina y en sus glaciares “.

Además, dicen que “estas cuencas son estacionarias y suelen evaporarse o infiltrarse mientras recorren los bajos de Santa Elena, entre las ciudades de Chilecito y La Rioja. Es conocido que los ríos de la región andina regulan de manera crítica a toda la población que habita la zona. La Rioja no es la excepción. Sabemos también que los glaciares y otros cuerpos de hielo regulan y contribuyen a los caudales de los ríos, y que este aporte es aún mayor en años especialmente calurosos y/o secos”.

También , exponen en su informe que “si bien no podemos saber con certeza cuál es el aporte exacto del hielo de montaña a los ríos, sí sabemos que con el pasar del tiempo, con el calentamiento global y con el retroceso y paulatino derretimiento de los glaciares, ese aporte será cada vez más importante y más significante”.

Ante esto, aseveraron que “el objetivo de esta sección, ante la negación de las autoridades provinciales sobre la existencia de glaciares en la provincia, es informar a la población sobre la relación que los glaciares de la provincia tienen con los ríos de la zona. Considerando que además estos ríos en algunos casos son trans-provinciales, cobrando aún más importancia esta relación en la consideración del sistema nacional hídrico”.

Al mismo tiempo, indicaron que “es precisamente por esta razón que las recientes leyes nacionales y provinciales sobre glaciares protegen los glaciares de escombros, descubiertos y los ambientes periglacial. Es porque estos cuerpos que almacenan hielo y que son delicados reservorios para el futuro, actúan como reguladores de cuencas hídricas, especialmente en años secos y calurosos”.

Enfatizando en el informe de que “no debemos aceptar el argumento que estos cuerpos de hielo son pequeños o insignificantes en su aporte. Tampoco es cierto el argumento de algunos que los glaciares en equilibrio no aportan agua a los ríos. No aportan agua neta, porque receptan agua y luego la vuelen a largar con el deshielo, pero sí están aportando agua permanentemente a los ríos, y esta agua la aportan de manera “regulada” y medida, y no toda junta con el primer calor. En este sentido, cumplen un rol fundamental en el equilibro ecosistémico. Tampoco debemos minimizar la importancia de glaciares de roca. Estas masas de hielo pueden almacenar una importantísima cantidad de agua y ciertamente con la evolución actual del clima, aportarán cada vez más agua”.

Por ello, señalaron que “con la llegada de nuevos proyectos mineros de gran escala a La Rioja, la provincia deberá establecer un marco claro y contundente de protección a sus reservas de agua, y esto incluye también a los glaciares y otros cuerpos de hielo con los que cuenta la provincia. La protección de estos recursos ante los eventuales impactos que puede ocasionar (y que en provincias como San Juan y también La Rioja, ya están ocasionando) proyectos mineros, este marco de protección es clave para asegurar un desarrollo equilibrado y ambientalmente sano”.

Cabe mencionar que el Centro de Derechos Humanos y Ambiente (CEDHA), creado en 1999, según afirmaron “es una organización no gubernamental sin fines de lucro cuyo objetivo es construir una relación más armoniosa entre el ambiente y las personas. El trabajo se centra en mejorar el acceso a la justicia de víctimas de violaciones de derechos humanos producto de la degradación ambiental o a causa de la gestión no sustentable de los recursos naturales, y prevenir futuras violaciones. Para ello se impulsa la generación de políticas públicas que promuevan el desarrollo social y ambientalmente sustentable e incluyente a través de la participación comunitaria, el litigio de interés público, el fortalecimiento de instituciones democráticas y la capacitación de actores clave”.