Una familia carenciada fue afectada por las precipitaciones que se registraron en las últimas horas. Si bien el registro de lluvia en esta ciudad alcanzó los 11 mm, estos fueron suficientes para que se le inundara un colectivo que fue acondicionado como habitación.
Se trata de Carlos Toledo de 32 años, quien junto a su hermana, una nena de 5 años y un bebe de un año viven en un herrumbroso colectivo que lo compró a un vecino de esta ciudad de chepes. Por el momento solo vive de changas y pide ayuda de materiales para construir una piecita y un baño.
Durante la mañana de este jueves pidieron ayuda de colchones y de frazadas, como así también comida para los pequeños, que debieron soportar el frio durante la noche, teniendo en cuenta que se le mojaron todas sus pertenencias. El micro está ubicado en unos terrenos de avenida Belgrano sur, en cercanías al Barrio Santa Lucia.
“No tenia donde vivir y tuve que comprar este colectivo, para lo cual entregué un equipo de música y algo dinero que recaudaba de la venta de lavandina y de otros productos de limpieza” contó al Cronista Carlos Toledo. Se trata de un antiguo vehículo en desudo que ante la desesperante situación el hombre decidió cómpralo para tener un lugar donde vivir.
“Estoy con mi hermana y mis sobrinitos Brisa y Mariano en medio del barro, viviendo una situación caótica, pero tenemos fe en Cristo que el intendente y la gente de este hermoso pueblo nos van ayudar” expresó Carlos. Dijo además “estoy muy agradecido de un señor de un comedor de la terminal que nos prometió tres platos de comida para dar de comer a estas criaturas”.
Toledo contó que “este casco fue del colectivo que usaba “Pepe” Pereyra para llevar el sonido, después lo tenían para acarrear leña y finalmente lo abandonaron y lo pude comprar, gracias a Dios” se conforma Toledo.
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