En una finca de Santa Cruz, los legisladores serán agasajados este miércoles por el primer mandatario y podrían definirse cuestiones políticas e informarse sobre los cambios de gabinete
El próximo miércoles, todos los integrantes del bloque de diputados oficialista fueron invitados a almorzar en una finca de la localidad de Santa Cruz, departamento Famatina. Los legisladores serán agasajados por el primer mandatario provincial para cerrar el año. Allí podrían definirse cuestiones de índole político y por qué no, informarse de los cambios de nombres en el gabinete que LBH tiene en carpeta y que se resiste a dar a conocer hasta ahora.
Será una buena oportunidad también para que se limen todas las asperezas -si las hubiere- para delinear una gestión que fortalezca la producción, se ejecute una política de salud acorde a los nuevos tiempos, el firme combate contra la inseguridad y la sensación de injusticia generalizada, además de evacuar las necesidades de la comunidad, con acciones sociales que puedan suplir las carencias de muchos sectores vulnerables que han quedado bajo la línea de pobreza. Estos temas han quedado relegados en esta primera parte de la gestión del famatinense, por estricta responsabilidad de los funcionarios que pasaron por esas áreas y poca huella dejaron.
En el "machete" que Beder tiene en su bolsillo, ya aparecen algunos nombres que podrían sumarse al equipo de colaboradores. Unos de incorporación inmediata y otros que recién pondrían la mano sobre la Biblia allá por febrero del año próximo.
Dos mujeres se disputan la "pole position" para ocupar el sillón que dejó vacante Délfor "Pocho" Brizuela en el Ministerio de Desarrollo Social. Griselda Herrera, esta semana que se inicia, dejará su banca de diputada nacional y suena como la mejor posicionada, pues el propio Gobernador le habría propuesto sumarse a esa cartera durante un viaje aéreo de Buenos Aires a La Rioja.
A la chileciteña no le disgusta para nada ese lugar, todo lo contrario. Es conocedora que sirve de catapulta para cosas importantes si se hace una buena gestión social y al Gobernador le asegura que ese ministerio por fin tenga algo de movimiento con un trabajo más constante.
Esta semana se sentarían a conversar sobre las condiciones, especialmente por los colaboradores que se elegirán para secundarla. Es allí donde entra a tallar la ex candidata a diputada provincial Teresita Madera, porque la idea sería que conforme la dupla con Griselda en el puesto de secretaria. La ex diputada nacional no estaría dispuesta a recibir imposiciones de nombres y allí estaría la principal traba.
Pocos son los que hablan ya de una Madera ministra y también se desmoronó la operación mediática que trató de instalarlo a Gastón "Ladrillón" Millicay como postulante al cargo. El sobrino del Gobernador cuenta con cero adhesiones en el ambiente bederista y no son pocos los que ven con desagrado la manera en que se mueve en su gestión como Coordinador provincial.
Otro que presenta cierta resistencia todavía, es el recientemente electo diputado Fernando Rejal, por lo que su posible desembarco en el Ministerio de Gobierno podría quedar recién para el mes de febrero a la espera que la decisión madure un poco más. Mientras tanto, el Gobernador no debería descuidar esa área de la que depende la Policía, pues se viene la época de vacaciones que es harto aprovechada por los "cacos" para desvalijar las viviendas deshabitadas. La subrogancia de Graciela Nader no convence demasiado y la sensación es que todo continúa con piloto automático, como sucedió en los últimos meses.
Por su parte, los diputados siguen haciendo lobby para tratar de insertar en el gabinete a los nuevos "desocupados" que culminaron con su mandato en la Cámara. Mientras en la semana que pasó, hubo dos renuncias de funcionarios. Fernando Scartezzini dejó Modernización del Estado, una dependencia que nunca se supo bien para qué había sido creada y esto quedó en evidencia cuando el propio secretario de la Gobernación, Luis Brizuela, de muy mala manera, le recordó que le desocupara la oficina de una vez. Mas claro, échele agua.
Elio Díaz Moreno también plantó su dimisión y puso fin a muchos años a cargo de la Secretaría de Salud, ya que fue uno de los pocos funcionarios que sobrevivió a la caída de Angel Maza.
Previamente ya sonaba fuerte que la jefa de la Zona Sanitaria III, Liliana Díaz Carreño, llegaría a ese cargo para sostener a un alicaído Gustavo Grasselli, que tendría unos meses más para tratar de revertir la pobre gestión desempeñada hasta ahora en el ministerio.
Beder Herrera ahora tiene la palabra y deberá tomar decisiones acertadas, porque el margen de error es ciertamente nulo. La ciudadanía le otorgó la confianza para que conduzca los destinos de la Provincia. Hoy encara un período de renovación, para lo que deberá tener la mente fresca, tomar conciencia, escuchar al pueblo y realizar los cambios sin importar los compromisos, sino que los cargos sean cubiertos por hombres o mujeres capaces de servir a esa comunidad que le confió su voto.
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